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| P. Jaume Reynés Matas |
3 de abril del 2012
Jaume Reynés cede el cargo de Prior de Lluc a Antonio vallespir
El relevo en la cúpula del Santuario se llevará a cabo el Diumenge de l'Àngel.
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| P. Antoni Vallespir |
El santuario de Lluc tendrá un nuevo prior el próximo día 15 de abril, jornada de celebración del Diumenge de l´Àngel. Jaume Reynés, que ha ocupado el cargo durante los últimos once años, dejará de ser el prior del centro espiritual de Mallorca, una responsabilidad que dentro de pocos días pasará a ejercer Antoni Vallespir Llompart, actual administrador general de la congregación de los misioneros dels Sagrats Cors y conocido por su rechazo, hace unos años, a la construcción del hospital de Son Espases junto al monasterio de La Real, en Palma, del que fue prior hasta el año 2007. Por su parte, el hasta ahora prior del santuario de la Serra, Jaume Reynés, pasará a ejercer de vicario general de la citada congregación de misioneros, cargo que ejercerá desde Palma.
El cambio en la cúpula clerical del santuario de Lluc, que todavía no ha sido comunicado oficialmente por el obispado de Mallorca, que ya ha dado el vistobueno, fue decidido el pasado verano, durante el último capítulo general de la congregación de misioneros, cónclave que se celebra cada seis años y durante el que es habitual la aprobación de diversos cambios de cargos.
El propio Jaume Reynés confirmó ayer a este diario que el nuevo superior general de la congregación, Pere Riera, le había propuesto un cambio de destino al considerar que ya había cumplido una etapa como prior de Lluc, sugerencia que Reynés aceptó porque, según aseguró, ya había "insinuado" en diversas ocasiones su ofrecimiento para abandonar el cargo. "Se ha acabado una etapa, y ahora empieza otra", apuntó ayer.
Reynés tiene previsto despedirse de todo el personal de la parroquia y de los feligreses del santuario durante los próximos días, con motivo de la Semana Santa, antes del traspaso oficial de poderes que se llevará a cabo el domingo día 15.
El hasta ahora prior de Lluc deja el cargo en una época difícil para el santuario, víctima de la crisis económica, lo que ha llevado a poner en marcha iniciativas inéditas hasta la fecha como la explotación económica del aparcamiento que entró ayer en vigor. Sin embargo, ya será el nuevo prior quien se encargue de hacer balance y analizar los primeros resultados de esta polémica decisión cuya gestación, por otra parte, Vallespir conoce en profundidad debido a su cargo de administrador general de la congregación de misioneros.
Jaume Reynés explicó ayer que siempre conservará un recuerdo "especial" de su etapa en el santuario, un lugar que, según confesó, lleva en el corazón desde hace tiempo, ya que, además de los once años que ha pasado como prior, estuvo destinado en Lluc entre los años 1951 y 1965.
El todavía prior valoró de forma positiva la gestión realizada a lo largo de su mandato, destacando las distintas fases de embellecimiento del santuario o el proceso de apertura a las niñas de la Escolanía de los Blavets de Lluc. Sin embargo, admite que su sucesor deberá lidiar con situaciones difíciles debido a la falta de fondos económicos.
El cambio en la cúpula clerical del santuario de Lluc, que todavía no ha sido comunicado oficialmente por el obispado de Mallorca, que ya ha dado el vistobueno, fue decidido el pasado verano, durante el último capítulo general de la congregación de misioneros, cónclave que se celebra cada seis años y durante el que es habitual la aprobación de diversos cambios de cargos.
El propio Jaume Reynés confirmó ayer a este diario que el nuevo superior general de la congregación, Pere Riera, le había propuesto un cambio de destino al considerar que ya había cumplido una etapa como prior de Lluc, sugerencia que Reynés aceptó porque, según aseguró, ya había "insinuado" en diversas ocasiones su ofrecimiento para abandonar el cargo. "Se ha acabado una etapa, y ahora empieza otra", apuntó ayer.
Reynés tiene previsto despedirse de todo el personal de la parroquia y de los feligreses del santuario durante los próximos días, con motivo de la Semana Santa, antes del traspaso oficial de poderes que se llevará a cabo el domingo día 15.
El hasta ahora prior de Lluc deja el cargo en una época difícil para el santuario, víctima de la crisis económica, lo que ha llevado a poner en marcha iniciativas inéditas hasta la fecha como la explotación económica del aparcamiento que entró ayer en vigor. Sin embargo, ya será el nuevo prior quien se encargue de hacer balance y analizar los primeros resultados de esta polémica decisión cuya gestación, por otra parte, Vallespir conoce en profundidad debido a su cargo de administrador general de la congregación de misioneros.
Jaume Reynés explicó ayer que siempre conservará un recuerdo "especial" de su etapa en el santuario, un lugar que, según confesó, lleva en el corazón desde hace tiempo, ya que, además de los once años que ha pasado como prior, estuvo destinado en Lluc entre los años 1951 y 1965.
El todavía prior valoró de forma positiva la gestión realizada a lo largo de su mandato, destacando las distintas fases de embellecimiento del santuario o el proceso de apertura a las niñas de la Escolanía de los Blavets de Lluc. Sin embargo, admite que su sucesor deberá lidiar con situaciones difíciles debido a la falta de fondos económicos.
J. FRAU
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